Diomary La Mala y La Materialista
POR MARCOS SANTOS. – La popular artista del género urbano, La Materialista, publicó un vídeo en su cuenta de Instagram, donde se ve a la referida cantante realizar movimientos pélvicos en alusión a un famoso baile promovido por la cantante brasileña Anitta, quien, de acuerdo a publicaciones, es la artista más escuchada en la plataforma Spotify.
El caso es que la sensual interprete dominicana, no deja casi nada a la imaginación en el referido vídeo.
De hecho, ese audiovisual, puede ser considerado por muchas personas como inmoral.
Este es un tema un tanto delicado, sobre todo que vivimos a nuestro entender en una sociedad muy liberal, y donde da la impresión de que figuras públicas acuden a cualquier cosa, para estar en la palestra y lograr titulares en los medios de comunicación.
Es lo que le llaman ahora “buscar sonido”.
Incluso, esa búsqueda de sonido, no necesariamente va acompañada de una oferta con calidad.
Por ejemplo, qué respeto genera un comunicador rompiendo una mesa en pleno desarrollo de su programa.
Ninguno, desde nuestro de punto de vista.
Pero, hay muchísimas personas que le gusta ese tipo de show, y son esos escandalosos que se convierten en virales en las redes sociales.
La Materialista tiene una buena carrera musical en el movimiento urbano dominicano.
Pero últimamente lo que más ha tenido connotación a su alrededor, han sido la “filtración” de vídeos eróticos que han sido publicados en su cuenta de OnlyFans.
El tema es que la cantante Diomary La Mala, ha cuestionado la publicación del dichoso vídeo de La Materialista, donde se le ve dando “golpes de barriga” a dos manos.
Dice la excelente interprete francomacorisana, cito: “La verdad es que es difícil trabajar en pro de la mujer mientras eso es lo que es tendencia. Alguien que me oriente por favor”.
Quien suscribe, está totalmente de acuerdo con ese planteamiento.
Y ojalá no nos tilden de anticuado, ni de anti chévere.
Porque no es verdad que ver una artista en un vídeo erótico, con movimientos sensuales, debe constituirse en algo digno de imitar.
Y es tendencia en las redes sociales, porque a la gente le gusta el morbo.
Gracias a Dios, los artistas que recurren al morbo y a la indecencia, no perduran en el tiempo, salvo algunas excepciones.
Johnny Ventura querido, admirado y respetado merenguero dominicano, nunca recurrió a la vulgaridad para mantenerse por tantos años en el gusto popular.
En cambio, Blas Durán, logró una pegada muy efímera cantando pleberías, pero ya nadie se acuerda de su carrera artística.
Volviendo a lo anterior, si queremos que nuestras mujeres se dediquen a llenar las redes sociales con contenido erótico, ¡aplausos al erotismo!
Y que ese erotismo, le deje beneficios económicos, ¡aplausos al erotismo!
Si es así, vamos o estamos llegando a la degradación de la sociedad, y de la misma imagen de la mujer.
Porque, nosotros los hombres, solo nos vamos a detener a ver material audiovisual donde las mujeres salgan con poca ropa o enseñando una teta o una chapa de nalga.
Cuando miremos una mujer, en este caso una artista, con una propuesta decente, basado en su talento, con buenas letras, con romanticismo, muchos la mandaran al carajo y todo porque no incita al morbo.
Y no debe ser así.
Ojo, hay artistas sensuales de por sí, pero no llegan a la vagabundería.
Fomentemos los buenos valores.
Esa debe ser la regla y la norma.